La planta no puede impedir su florecimiento.
Algunas veces florecer para ella es morir.
¡No importa, la sabia siempre sube !
... Hay éxtasis en una costa solitaria; Está la sociedad donde nadie se inmiscuye, por el océano profundo y la música con su rugido: No amo menos al hombre pero si más a la naturaleza...