# C a m u n i

02 abril 2012

La tragedia de mi vida.


..."Experimentas la simpatía, la sentimentalidad del espectador que presencia la representación de una obra conmovedora. Y no te das cuenta de que eres tú el autor verdadero de la tragedia."
“El Odio en tí siempre fue más fuerte que el Amor… No se te dio por pensar que no cabían, al mismo tiempo, en una misma alma, ambas pasiones. Que no pueden hacer vida en común en la bonita morada para ellas construida. Se alimenta el Amor de la imaginación merced a la cual rebasa nuestra razón a nuestra sabiduría,  a nuestra bondad, a nuestro sentimiento, a nuestra nobleza, a nuestra propia vida; la imaginación, merced a la cual podemos abarcar la existencia en su conjunto; la imaginación, gracias a al cual nos es dable comprender a los otros en sus relaciones reales e ideales. Sólo puede nutrirse el Amor con lo Bello, y con lo que ha sido ideado en la Belleza. Todo, en cambio, nutre al Odio. … Ciega el Odio a  los seres humanos… Tal como corroe el líquen las raíces de las plantas sin savia, del mismo modo te ha corroído a tí el Odio, hasta conducirte, de una manera paulatina, a no ver más que tus mezquinos intereses y los más pobres fines”…